Este amor incipiente , albergado
bocado de ilusiones tenues
amenaza el barrio
mi barrio otoñal de cerezos labiales
emergencia viva hay
cuando la distancia se acorta
y cruzo la vereda buscando signos
aquellos signos empolvados
aclaro la noche emotiva
una bombilla que balancea silente
clarividente de todo horizonte
protoamor que asoma entre los cardos
que perturba el reloj mineral
que abre paso por el arenal de los días
eres esa brisa marina
en mi suburbio desvencijado
pequeño colibrí a mil vuelos
mi suelo olvida por un momento
los huesos de la memoria
eleva mi alma sedienta donde la flor explota.
Elisa
doméstica
bocado de ilusiones tenues
amenaza el barrio
mi barrio otoñal de cerezos labiales
emergencia viva hay
cuando la distancia se acorta
y cruzo la vereda buscando signos
aquellos signos empolvados
aclaro la noche emotiva
una bombilla que balancea silente
clarividente de todo horizonte
protoamor que asoma entre los cardos
que perturba el reloj mineral
que abre paso por el arenal de los días
eres esa brisa marina
en mi suburbio desvencijado
pequeño colibrí a mil vuelos
mi suelo olvida por un momento
los huesos de la memoria
eleva mi alma sedienta donde la flor explota.
Elisa
doméstica
A veces una pequeñas bombilla nos ilumina el horizonte.
ResponderEliminarBesos, Elisa.
Olvídate de la memoria y disfruta de la flor.
ResponderEliminarBesos.
Permite que el protoamor te libere de todo lo contingente.
ResponderEliminarUn beso.
Que ese protoamor sea el gran amor de tu vida.
ResponderEliminarFelicidades, Ely
muchas gracias por sus palabras y ánimos
ResponderEliminareste poema está inspirado en las vivencias de otra persona
Eres toda alma inmaculada, Elisa. Toda cielo, toda luna.
ResponderEliminarCruzar la vereda buscando signos... yo también soy de esos, aunque a veces no vea ninguno o me los invente. Buena semana!!!!
ResponderEliminarQue el ánimo no decaiga, y hay que seguir soñando.
ResponderEliminarAbrazos gorditos Elisa.
Hay en estos versos como una memoria melancólica de eventos, que quisieras que estuvieran ahora, pero se empalidecen, a pesar del color que color que pongas, y hay también desmemoria, para poder saltar con alas al abismo del cielo. Un abrazo. carlos
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