Reflejos escondidos como signos temerosos
preguntan y bailan en derredor
mi corazón no alza su bandera
tengo un verso de oro al sur de las montañas
parece que este candil no alcanza
mi ventana no cuelga primaveras
podría levantarme del espejo
podría correr por el pasillo
podría volar con los cuervos
podría intentar círculos
pero esta soledad es tibia y mansa
a veces supongo la felicidad del día
con su aguamarina reluciente
pero mi mano coincide con la pena y el eco
lejos los pensamientos ya no sorprenden
despeinan palabras del pozo y del alba
caricias por donde escapar
este acampar entre nieblas.
Lichazul
mundos paralelos
Keren..👍
ResponderEliminar👍🐲
EliminarNi primaveras, ni banderas, ni fuegos artificiales... pasan los días y nada.
ResponderEliminarEse es mi hoy.
Y creo que es más agradable que el mañana.
Soledad tibia y mansa... bueno, no es poco.
Besos.
Si ,ocurre, ya amanecerá
EliminarBesitos 😽😽😽
Ya no hay ni amaceres luminoso
ResponderEliminarTodo es oscuridad,muy triste.
Besitos dulces
Siby
Besitos 😘 de luz
EliminarUnas tinieblas muy bien dibujadas en tristes pero bonitos versos y metáforas.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Abrazos.
No son tinieblas, sino niebla y la niebla es mágica ☺️
EliminarGracias por tu huella
Abrazos 🤗
Ojalá se levante la niebla..
ResponderEliminarTristes pero hermosos versos que dejan un halo de esperanza.
Un beso.
En lo personal amo los días y noches con niebla, tiendo a lo freaky 😊
EliminarAbracitos 🤗🤗🤗
Fantástico!!! Enhorabuena Lichazul y gracias por compartir.
ResponderEliminarAbracitos 🤗
EliminarCuanto aprieta la soledad, que nos hace desear los tiempos en que aún no era niebla. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarOtro abrazo 🤗
EliminarHe estado leyendo el poema y los comentarios y coincido contigo. La niebla, o la neblina como le decimos donde vivo, a mí también me ha parecido mágica. Vivo en el valle del Guadalquivir, a diez kilómetros del mar, y hay mucha humedad. Tierras bajas y mucha niebla de vez en cuando. Cuando iba a colegio yo tenía que subir un puente sobre la autopista y entonces, a veces, salía por lo alto de la niebla y miraba hacia abajo y era como un mar de nubes. Es misteriosa, peligrosa si se conduce, pero también jugaba por la noche con la linterna y veía ese haz de luz atravesarla. En fin, la niebla me ha encantado siempre, es como una especie de abrigo. Además, aquí decimos, 'Mañanita de niebla, tarde de paseo', y era verdad, las tardes de las mañanas de niebla, son soleadas, salvo en enero, que hay veces que no levanta. Vaya parrafón que te he soltado, pero es que me encanta la niebla. Abrazos!!!!!!
ResponderEliminarGenial,todo un bello instante De vida me compartes 👍🤗🤗🤗 abracitos
EliminarEn estos versos,la tristeza y la belleza se dan la mano,lo que demuestra que lo bello no está reñido con la pena.
ResponderEliminar¿Qué haces para que sienta la necesidad (siempre) de leer tus poemas más de una vez? Y no creas,no con todos me pasa.:)
Abrazos de primavera en la ventana.
Entre tinieblas nacen poemas.
ResponderEliminarLa última estrofa me parece bellísima, Elisa.
Besos.