Las tres de la mañana
rondando las sombras
el pulso teme
como un infante entre las horas
mi historia
se cuenta en cada baldosa
mis esbirros
me alcanzan rompiéndome
me alzan entre sus risas
laceran cada giro en la almohada
cuando cerca siento el temblor
mi corazón
solo busca el final
pestañas y pies
hacen que el abismo ocurra
y dicen que es porque te extraño.
Lichazul
weekend
Es la prueba más evidente, lo has hilado genial. Abrazos.
ResponderEliminarAbrazos 🤗
EliminarAlgo por lo que todos hemos pasado. Bien plasmado, felicidades.
ResponderEliminarSaludos.
Saludos 👍
EliminarHay ausencias delirantes
ResponderEliminarUn beso!
Besitos 😽
EliminarLos insomnios suelen aparecer cuando el pensamiento no logra el descanso y, una y, otra vez, ese recuerdo y esa necesidad de ese alguien especial.
ResponderEliminarBesos querida Elisa. Buen finde extenso.
Besitos 😽 y feliz fin de semana también
EliminarCuánta sensibilidad cuando el corazón está enamorado y solitario.
ResponderEliminarDe pronto se hace muy difícil la travesía.
Un gusto leerte. Buenas noches, amiga 🌃
Gracias y bienvenido ☺️
EliminarLas tres de la mañana son muy afortunadas de tenerte.
ResponderEliminarY el insomnio debe estar enamoradísimo...
Besos.
Besitos 😽😽😽
EliminarDicen.
ResponderEliminarSonrío.
El poema insomne lleno de corazón.
Besos, Elisa.
Besitos y muchas gracias por todas tus huellas Verito
EliminarAbracitos 🤗
Quién no lo ha sentido? Escuece, duele el alma. Un abrazo. Carlos
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