Para sus huesos

No voy a estallar con tu mirada
ni tampoco me evaporaré con tu silencio
sabes que anduve por lupanares mohosos
y que me bebí noches y noches de tinieblas
dirigí el coro de mis demonios
corrí con el corazón lo más apretado
pero fue en vano...
mis pesadillas siempre dejaron la puerta abierta
la escalera presta para bajar por ella
allí donde mi canto se refugió
y la verdad;  ya me da igual

asomé a las calles en primavera
pero
los perros siguen con las mismas mañas
y los dinosaurios
buscando un sol para sus huesos.

Lichazul
oscureciendo