Tengo una espina clavada
una dulce espina que duele y sangra
la he cuidado desde que asomó
con la paciencia y el ánimo
cuando la luna del espejo no refleja
solo queda el irse
las horas se hacen filosas guadañas
mi cabeza intenta dirigir esta tormenta del corazón
con esa razón de las canas
pero no logro acertar al centro
sus vientos arrasan con cada palabra
mis manos arrugadas ya no limpian lo sucio del día
se han quedado presas en toda emboscada
sus puños tiemblan de impotencia
como un lirio en la niebla
tengo una espina clavada con su miel y dolor .
Lichazul
Susurros del campo
una dulce espina que duele y sangra
la he cuidado desde que asomó
con la paciencia y el ánimo
cuando la luna del espejo no refleja
solo queda el irse
las horas se hacen filosas guadañas
mi cabeza intenta dirigir esta tormenta del corazón
con esa razón de las canas
pero no logro acertar al centro
sus vientos arrasan con cada palabra
mis manos arrugadas ya no limpian lo sucio del día
se han quedado presas en toda emboscada
sus puños tiemblan de impotencia
como un lirio en la niebla
tengo una espina clavada con su miel y dolor .
Lichazul
Susurros del campo
La espina se hace poema pero sigue siendo espina.
ResponderEliminarOjalá algún día desaparezca de tu vida y de tu poesía.
Besos.
ya no Toro
ResponderEliminarme iré de este mundo con esa espina
besitos
Hermoso poema aunque repleto de desasosiego y desamor. Me gusta mucho esa espina, por más que cause dolor, porque en el fondo también tiene su lado menos amargo, como bien señalas al final en tu poema. Un abrazo.
ResponderEliminarla vida es una ruleta aveces arriba a veces abajo
ResponderEliminarotro abrazo
ResponderEliminarEs verdad Elisa, la vida es como una
ruleta de juego, pero espero que tu
siempre quedes arriba chica bella,
y sigue regalandonos poesia.
besitos dulces
Siby
gracias Siby por leer el comentario que le dejo a Sechat
ResponderEliminara veces leer la poesía que dejo en el post es demasiado tiempo para quien viene jejeje
buena semana
Es verdad amiga, aunque las espinas estén clavada con miel siempre duelen y hacen daño...
ResponderEliminarComo siempre encantada de leerte de nuevo, besos y buen comienzo de semana
buena semana para ti también Enca
ResponderEliminarsaludos
Esas espinas suelen quedarse y con ellas hemos de (con)vivir.
ResponderEliminarAl menos queda la Poesía.
Abrazo, Elisa.
abrazos Verito
ResponderEliminarhay día donde la punzada duele más y otros donde apenas se siente :)
Dolor y goce.
ResponderEliminarBello.
Besos.
saludos Amapola
ResponderEliminarLas tormentas cuando la nieve se queda en nuestras güedejas, viene con más virulencia. Un abrazo. carlos
ResponderEliminarEsos vientos que arrasan con cada palabra siempre ganan a la razón.
ResponderEliminarQueda ese lirio en la niebla con su espina. Un día cambia.
Besos, Elisa.