Rodando tornillos

Los lobos son sabios
y las ovejas unas prostitutas
ayer recorrí el laberinto
tomé mi guitarra y ahogué el llanto
soporté más de lo que las cuerdas amplificaban
ahora en medio de la soledad
veo pasar el carruaje y sus candilejas
disolviendo el hielo
rasguñando el polvo
y nada me hace sentir mejor
el soplo es el solo en el eco de mi canción

los lobos marchan camuflados
por si los hombres disparan
por si las ovejas desenredan sus lanas
son las fecundas y manoseadas
insípidas y veganas hasta el infinito
puedo verlas pero no tocarlas
puedo hablarles pero no seducirlas
aúllo en mi rincón.

Pregón desfachatado
es el estado perverso de la razón
un corazón con giros
un tornillo rodado.

Lichazul
desde la persiana

Mareo

Tengo un manojo de miedos aquí
justo aquí en mis ojos
tiemblan como yo
no veo el final ni el giro ni la línea
solo sigo el mareo del cambio

mochila llena de recuerdos en mí
*19 años de vicios y arena
mis cosas borrosas
mis poemas guturales
mis barriales abruptos
mis conceptos abstractos
mis humos sedientos
mis devaneos precarios
mis pérdidas añiles
mis febriles esperanzas

solo tengo este salto al vacío
este palabreo conjetural
y un lagrimal contenido
en el adiós
sabe Dios dónde migraré
porqué niebla citadina el respiro yerre

soy el claro oscuro mutante
el inasible caminante de mil lunas.

Lichazul
desde la persiana
*escribiendo poesía

Flor de liz

Es instante de placard dice la canción
y sí, mi colgador dice adiós
es que me mata la ausencia de recuerdos colgados
fugaz ilusión  el tiempo
juego con el límite
y hasta con los nombres
tendría que volver a respirar
esta novedad de no volver
esta opacidad celular
esta mentira de a dos
esta añeja calle
este trance borgiano
la mano se detiene frente al reflejo
aceptar el temblor y continuar
en un mar lleno de salobres deseos
continuar en el éxtasis psicodélico 
mi religión
mi eslabón
mi prisión y mis alas
allá, por las mañanas del calendario bisiesto
y querer el empujón y saltar
hasta reventar la pared
con ese tiro imposible de atrapar
y jurar en azul el poema
para que tu remera quede intacta
locura es lo que trae el pan diario
locura de miel
y mi fiel optimismo
allí, esperando en el dintel
por si vienes en secreto y rozas mi flor de liz.

Lichazul
desde la persiana

Lodo

De lodo amasado
tengo el cuerpo
barro medicinal
barro incondicional
barro memorial
barro conceptual
en mis uñas y en mi fortuna
en la cama y en la guerra
sol camuflado
canto terroso... notas de raíz
aprendiz entre reinos paralelos

tengo el tiempo granulado
viajero en instantes acuarelados
camino con la espina insurrecta

hurgo la piedra , la compañera ,
la testigo perfecta de mi caricia
arma tribal en la ira desquiciada
cuando la noche ciega me traga

tengo el polvo revuelto
en mis adentros
en mis querencias
la paciencia solo aturde revoluciones
cuando el reflejo es niebla
y siento el temblor
el certero derrumbe
que deja al olvido mi nombre.

Lichazul
desde la persiana

Sospechas

No creas en mis palabras
sospecho que voy en picada
una y otra vez 
el hambre por las noches sueña
y el frío solo es la excusa perfecta
porque a través del cristal
el amor se hace  maniquí insípido

ahora o nunca parece ser la trampa
y el cerrojo cede
del que espera en su velada sombra
mañana será tarde

no creas en mis delirios
conjuran montañas y nubes
el juego es continuar
así el viento lleve mis raíces
aunque sospeches y renuncies
nunca fue el quedarme aquí.

A veces ni yo misma me creo
dudo y sospecho
el corazón me delata.

Lichazul
desde la persiana

No es cosa de cigarrillos

Qué le voy  hacer
si esta obsesión carcome los rincones
y mis huesos enfrentan vientos de dudas

no es cosa de gustos
no es cosa de cigarrillos
ni siquiera del amanecer

cada vez que torno mis ojos allí está
sigue pintando caminos de luz
sigue jugando al vigía

alrededor mío llaman
con esa farsa de jaulas doradas
solo estoy fingiendo estar ocupada

y suelto el río
y desmorono mis emociones
y soplo mis juicios

esto no es amor , no lo es
ayer amé y creí
como una violeta del jardín perdido

Qué le voy hacer
solo estoy sola en mi soledad.

Lichazul
desde la persiana

Sucede sucedáneos

Entre cuentos y cuentas
las ovejas zigzaguean cabizbajas
en el internado
 arremolinadas y blanco
nada interviene el paisaje poniente
son penitentes de la memoria
mientras
en la loza de la terminal
el historial crece exponencialmente
negras y overas
obreras fulltime
la rampa bambolea como un hula hoop
el zumbido adormece
todo parece decantar en una bolsa de papas fritas
y la azafata me mira igual que a Gervasio
desde el rincón del avión
mi aguijón gutural
escapar o saltar hasta respirar

cuentos y cuentas
sucedáneos jubilosos al final del ojo.

Lichazul
desde la persiana