lunes, 15 de enero de 2018

En despoblado

Tiene el arcoiris en sus manos y una sonrisa cándida
baila por las aceras su música ligera
sueña con mundos amables
solo que
no debe olvidar su dosis  al medio día
pues la esfera que le protege  resultaría rota

 conoce los giros de cada tormenta
sabe que esa fuerza es imparable
le tiemblan los años
le sudan los nervios y los vocablos
trata de que nadie lo note

mas, yo le noto y le observo
soy su sombra en el vértigo bestial
aunque a veces acampo en despoblado.

Lichazul
entre la hierba




19 comentarios:

  1. o la pesadilla del otro...
    abrazos Carlos

    ResponderEliminar
  2. Ser la sombra de un árbol en invierno que hunde sus raíces para florecer en primavera. Ojalá alguien sea nuestra sombra afectiva y borre la soledad cuando aminoremos fuerzas.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  3. Muy observadora como sombra protectora. hummm
    besos Elisa
    Mavi

    ResponderEliminar
  4. La sombra es nuestro traje de gala en días de sol.
    Un placer leerte Lisa.

    ResponderEliminar
  5. Sombras amenas,y deliciosas: Me ha encantado eso de; "conoce los giros de cada tormenta; me parece exquisito.

    Abrazos gorditos Elisa.

    ResponderEliminar
  6. El arcoiris en sus manos. El arcoiris es una herramienta de alegría y de lucha. Me gusta esa manera de soñar, aunque no deba olvidar su dosis.
    ¡Abrazos!

    ResponderEliminar
  7. Hola guapa, me hace ilusión saber que el Papa Francisco anda por ahí, cerquita de donde vives.
    Es una suerte haberte encontrado en el tiempo y el espacio.
    Así que sin más te digo que te quiero mucho Elisa linda.
    Tu Mavi

    ResponderEliminar
  8. Y tanto que es un vértigo bestial y tanto que se acampa en despoblado.
    Desolador.

    Besos, Elisa.

    ResponderEliminar
  9. muchas gracias a todos ´por sus huellas
    tengan un fin de semana precioso

    ResponderEliminar
  10. De como la fragilidad del otro nos ayuda a ser fuertes y a sacar fuerzas de flaqueza.
    Todo ternura este poema.

    ResponderEliminar