Ha muerto la niña
ha muerto en la desidia
ha muerto en silencio
ha muerto el instrumento
infancia ridicula
marchita antes de todo tiempo
paseó por calles
durmió en los adoquines
vistió las vidrieras con su reflejo
cuando el viento burlaba su falda
ha muerto la niña
y su recuerdo carece de culpables
el árbol es materia podrida
sus ramas no tocan el cielo
todo es un velo
todo es un gesto de cartón piedra
cuando las portadas inventan excusas al voleo
mientras los tesoreros
cuidan con celo sus ganancias
ha muerto la niña
y el festival de personeros comienza
la saliva les brota ahora
pero no cuando la niña viva estaba.
Lichazul
entre giros y espasmos
ha muerto en la desidia
ha muerto en silencio
ha muerto el instrumento
infancia ridicula
marchita antes de todo tiempo
paseó por calles
durmió en los adoquines
vistió las vidrieras con su reflejo
cuando el viento burlaba su falda
ha muerto la niña
y su recuerdo carece de culpables
el árbol es materia podrida
sus ramas no tocan el cielo
todo es un velo
todo es un gesto de cartón piedra
cuando las portadas inventan excusas al voleo
mientras los tesoreros
cuidan con celo sus ganancias
ha muerto la niña
y el festival de personeros comienza
la saliva les brota ahora
pero no cuando la niña viva estaba.
Lichazul
entre giros y espasmos
Triste la muerte de la niña Elisa y cuanta verdad hay en cada letra escrita...Solo la recuerdan y hablan cuando muere no cuando están vivas..Cuantas niñas hay así?Salen a la palestra y mucho bla bla bla cuando pasa pagina se olvida hasta que regresa!!
ResponderEliminarHa sido todo un placer el leerte
Abrazos Victoria
muchas gracias Victoria y bienvenida
Eliminarabrazos para ti también
Enorme soledad la que deja el poema. No hacemos nada por remediar el dolor y sin embargo sentimos impotencia ante un final funesto de un niño.
ResponderEliminarsomos una especie ruinosa con destellos ( pocos)
EliminarUna niña muere y ya nada tiene sentido, el universo llora y yo también.
ResponderEliminarBesos.
besos Toro y gracias
EliminarCreo que me pierdo algo del origen de este poema. Y me ha recordado a aquella historia que nos versificó José Martí con La niña de Guatemala. También me acuerdo del pobre Dilan, muerto en las playas de Turquía. O tantos y tantos niños que mueren abandonado.
ResponderEliminarMira, aquí en las playas de donde vivo, llegan pateras llenas de inmigrantes subsaharianos que cruzan el Estrecho de Gibraltar ¡después de cruzar el desierto del Sáhara! muchos mueren en el camino, sobre todo niños y niñas ... pues bien, una vez llegó una barca a la playa, en verano, atestada de gente... y hubo mujeres que habían tenido hace poco un hijo y le dieron de mamar, le dieron su pecho a los niñitos que venían en la barca, para que no murieran de hambre, pues bien, eso, según la legislación de España... es delito :( no entiendo nada, ni aunque me lo pongan en verso! Abrazos!!!!
no hay porqué perderse Alfonso , lamentablemente la realidad nos cachetea directamente pero somos una especie evasora y mientras no nos toque en carne propia... imposible hacer carne el dolor ajeno por eso este mundo humano es una bestialidad
Eliminarabrazos
Qué bien lo tratas en estos versos, sobre el soslayo que hoy se da sobre los niños. A nadie importan, bueno sí, para explotarlos o reducirlos a iniquidades de violencia sexual. Cierto, mueren y ante su cadáver encriptado, fluyen las babas y los lloros. Acaso contrición? Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarotro abrazo Carlos
ResponderEliminarsomos pura bestialidad